Con un quejido oculto
y protegidos por el calor de un cuerpo
esperais confiados, sin conocer
que acaso os olvidaron.
La historia fue,
haber tomado tierra en un lugar de necios y de sabios,
confusos o sublimes,
o simplemente humanos.
Haber tomado forma
lo que fue pensamiento,
lo que una noche fue canción para lo eterno.
Y así cuando yo os veo
y mis labios pronuncian vuestros nombres
se observa en el silencio,
abrazos infinitos desde el cielo.
…Con suavidad os beso
Y os aliento en mi canto,
porque sin tener culpa
os fueron olvidando.