Embriagador tormento…
quietud, tiempo,
luna vestida de diamantes
que en el día enamora
y en la noche te halaga.
Amor en soledades encontrado
amor joven y bello.
Cobijada en mi cueva de mortecinas luces
te entreveo.
Búscame que mi cueva se hunde,
engalana mi choza,
adórnala de flores
y deposita aromas
aquí,
en este hueco de la alcoba,
ayúdame a mejorar la entrada,
esta oscura
y no puedo saber lo que dentro se halla.
¿Quieres hoy ocupar esta mi pobre casa?